«Valor es lo que se necesita para levantarse y hablar, pero también es lo que se requiere para sentarse y escuchar»
Winston Churchill
– Estamos rodeados de valientes: personas que hablan, que proponen, que actúan, que siguen para adelante a pesar de las dificultades, personas que admiramos por su autodeterminación. Pero también hay otros valientes más silenciosos: aquellos que se sitúan frente a ti y solo escuchan, pero no lo hacen de cualquier forma, lo hacen utilizando todos sus sentidos para implicarse, para estar contigo ese pedazo de tiempo que compartes con ellos.
– Perdiste la cabeza!!! ¿Quieres decir que valentía es escuchar?. Entonces lo que me estás queriendo decir es que todos somos valientes ya que todos escuchamos. Yo siempre pensé que la valentía era enfrentarse a las situaciones arriesgadas y difíciles.
– Cierto, hay valientes que hacen cosas extraordinarias, pero también todos somos héroes y heroínas potenciales, ya que todos vamos a tener que superar situaciones adversas, de todas formas, de la valentía que hablo es más delicada, ya que todos la poseemos pero hay que domarla.
– De acuerdo, todos sabemos escuchar pero creo que el tipo de escucha de la que me hablas no es habitual, ¿no?
– No, la mayoría de las veces cuando escuchamos estamos pensando lo que queremos responder, y deseando que el otro calle para empezar a hablar. De la escucha que estamos hablando se conoce cómo ESCUCHA ACTIVA y se trata de estar presente, de no tener prisa, de no juzgar y no aconsejar, y especialmente, de escuchar lo que no se dice con la voz. Se trata de escuchar lo que la persona que tienes enfrente está transmitiendo realmente y que le va a permitir a su vez escucharse a sí misma, y aquí está realmente la valentía….en escucharse a un mismo y hacer frente a tus sentimientos y necesidades verdaderas.
– Y ¿donde podemos aprender a escuchar?
– Hay muchos libros y páginas webs que enseñan los principios de este tipo de escucha, pero el más importante es querer hacerlo, tomar conciencia e incorporarlo a tu día a día, así que siempre que hables con alguien tienes la oportunidad para aprender a escuchar.
– Me gusta la idea, pero ¿qué gano incorporando la escucha activa en mis conversaciones?
– Ganarás conexión, confianza y autoconocimiento.
– Uy!! Me gusta la idea, ¡trataré de escuchar de una forma más empática y conciente!
Escrito por: Iria Giráldez Ramallo